DILE A TUS MANOS

Dile a tus manos que se guarden tus caricias,
que sepan comprender que todo aquel calor
que me brindaban, ya se ha ido,
que aunque busquen despertar aquella magia,
mi piel hoy la rechaza.

Dile a tus ojos que se guarden tu mirada,
que sepan esquivar todo aquello que nos emocionaba,
y aunque petrendan que los mire como antes,
todo ya se ha ido.

Dile a tu cuerpo que no venga,
que tu piel no se roce con la mía,
que todo el calor que nos unía,
sólo en los recuerdos lo sentiría.

Dile a tu alma que hablé con ironía,
que todo lo que sentí, jamás lo perderé,
dile que la extraño, que es duro aprender a olvidarla,
dile que se vaya, que no escuche,
que se olvide de todo aquello que de mí recuerde,
que piense que fui allá lejos donde nada se recuerda,
donde todo aquello que se siente se sabe olvidar.

Pero no le digas nunca, que a todas estas palabras
las acompañaron mis propias lágrimas.

BAMBU